domingo, 27 de julio de 2008

Victimismo

Es difícil no sentirse una víctima de algo que parece que decide por ti, de algo que está ahí desde que tú recuerdas y que es tu enemigo y te ha robado la vida. No es parte de ti, ni lo quieres. Pero no hay forma de librarse de esto, de pasar página y soltar ese lastre y empezar de una vez a vivir.

Además, te sientes víctima porque sabes cómo nació todo esto. Porque sabes que en ese entramado tú no hiciste nada para buscarte esto, ni lo pediste, ni lo quisiste nunca. Porque sabes que los otros -en ese mismo entramado- se libraron de pasar por esto.

Pero sabes también que no hay culpables. Miras hacia atrás, y tienes la certeza de que cada uno lo hizo lo mejor que pudo, o lo mejor que supo. Desataron la tormenta, pero fue un accidente: cosas que se hacen sin saber lo que se hace. Aunque después te tocó pagarlo a ti.

Pues eso, te ha tocado. Qué se le va a hacer.

No hay comentarios: